El origen de esta arquitectura se remonta a la Edad Media y está vinculado al pastoreo de tipo comunal que se realizaba en las montañas de Cantabria. Las primeras cabañas fueron construidas como refugios por los pastores montañeses, eran edificios de planta rectangular, construidos con muros de piedra y cubierta a dos aguas realizada con entramado de madera. A partir del Siglo XVI la ganadería pasa de ser comunal a ser individual, lo que conlleva que empiecen a surgir "cierros" en los montes que pasan a manos privadas, estos prados cerrados se explotan estacionalmente con un sistema trashumante conocido popularmente como "muda", vinculado al cual se construyen las cabañas pasiegas, estas siguen conservando la planta rectangular tradicional de la cabaña pastoril, pero ahora pasa a tener dos plantas, la inferior destinada a cuadra y la superior a vivienda y pajar. Se siguen construyendo con muros de piedra, forjados de madera y cubiertas de lastra (piedra pizarrosa propia de la zona). Entorno a la cabaña pasiega surgen otros interesantes elementos arquitectónicos, como el patín (escalera exterior de piedra) o la "cuvia" (pequeñas cuevas artificiales utilizadas como fresqueras).
Actualmente usted puede acceder a una amplia oferta de este tipo de construcciones a unos precios muy interesantes. Son edificios que pueden transformarse facilmente en vivienda a través de la reciente modificación de la ley del suelo de Cantabria. Y que ponemos a su alcance con todo tipo de comprobaciones y garantías.
